Una profecía señaló a los clanes Djendel y Kranyal que debían unirse en tiempos de adversidad. Juntos fundaron un nuevo y próspero reino llamado Neimhaim, donde la hija de Gursti Bäradlig, líder de los Kranyal, y el hijo de Adroon, guía espiritual de los Djendel, se convertirían en los primeros reyes de una nueva dinastía legendaria. Tras su nacimiento, Ailsa y Saghan deberán superar muchas y complicadas pruebas para cumplir la profecía; para ello se criarán en una península solitaria, desolada y salvaje, y aprenderán, bajo condiciones extremas, el arte de la magia y de la espada. Entre ellos crecerá, de manera inexorable, un vínculo especial y potentísimo que será a la vez su mayor don y su mayor debilidad.
Pero a pesar de sus esfuerzos y de las promesas divinas, el futuro de Neimhaim tiene un poderoso enemigo: Nordkinn, un inmortal caído en desgracia que tiene sus propios planes para los herederos y para todo el país..
Este libro me provocaba sentimientos contradictorios, por un lado me apetecía una historia de vikingos, soy un fan acérrimo de la serie “vikingos” y me atraía bastante la sinopsis, por otro lado me repelía un poco, me parecía demasiado largo para ser una primera novela, y me parecía una historia que tenía un toque poco sutil Young adult.
Después de leerlo puedo decir que se confirman mis sospechas pero no tan profundamente como temía, es una historia de vikingos, pero más dulcificados que los de la serie. Y tiene un toque Young adult, pero no siento vergüenza ajena cuando lo he leído.
Dos clanes se unen para fundar un nuevo reino, los Djendel y Kranyal, los Djendel son pacíficos, adoran la vida, la naturaleza, y los Kranyal son guerreros. Para unirse definitivamente, los líderes deciden tener un hijo y una hija, que se casaran y serán los reyes. Pero sucede algo, y deciden que los niños tienen que exiliarse durante años para volver cuando sean adultos y ejercer como reyes…
Esto que estoy contando es el principio del libro, el libro es muy largo, quizás es un fallo que le encuentro, habría sido mejor un volumen más corto. Después veremos si continuamos con la historia. Es una manía que tengo lo siento.
Por otro lado, la historia si me ha gustado, me ha gustado sobre todo el hecho de que se trata claramente de magia y fantasía, era otro temor que tenía, encontrarme con un tratado sobre los vikingos sin nada fantástico. Pero no, los del clan Djendel tienen poderes, misteriosos poderes, el enemigo al que se tienen que enfrentar los chicos es un inmortal, un dios desterrado, lo cual lo hace muy interesante.
El libro está lleno de acción, no recuerdo ningún capítulo de transición, siempre está pasando algo.
En resumen os puedo decir que es un libro que merece la pena.
21/10/2015