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El verde entre las sombras

El verde entre las sombras
Martínez, Rodolfo Sportula 2021
1137 visitas

Kláiner ha abandonado su ciudad natal. Ya no es el temible Hereje, matador de monstruos y burlador de la Inquisición; tan solo un joven lejos de casa en un mundo que desconoce y que es mucho más grande y variado de lo que podría imaginar. En la ciudad de Nabati-Madi ha conocido a Alsher, simbionte de planta y humano, que lo acompañará en su búsqueda. No será el único.

 

Ibyra se ha visto obligada a huir después de que su hermano arrebatase el trono a su madre y se refugia en la díscola provincia del sur, donde se está construyendo en secreto un artefacto que tal vez cambie el mundo. Ya no es la Distribuidora Aspirante, que un día heredará la gestión del Cilindro Maestro; tan solo una joven lejos de casa que intenta descubrir cuál es su lugar en un mundo repleto de incertidumbre.

 

Y aquello que no es nada y ha salido del nexo que comunica todas las realidades sigue extendiendo poco a poco sus tentáculos por el mundo. Ya no es un prisionero.


El hueco al final del mundo - 2

Alta fantasía     

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4.0

Votos: 1
Ficción Científica
Ficción Científica

Ha valorado El verde entre las sombras con una puntuación de 4 sobre 5

04/03/2021

Ficción Científica
Ficción Científica

El verde entre las sombras


Ya tenemos el segundo volumen de “El hueco al final del mundo” y tenía muchas ganas de leerlo, la primera parte me apasionó y esperaba con ganas esta segunda, y bueeeeeno….

Tenemos a Ibyra que se ha visto obligada a huir de Irembe con una pequeña escolta y se dirigen a un lugar seguro. Por otro lado, Kláiner que se dirige a Irembe buscado a Ibyra para ayudarle.

Tal y como lo he puesto parece que todo el libro es de gente andando de un lado para otro, y no es así, Ibyra llega a a Janpodanbarí, una provincia de Irembe, donde se aloja con en casa del gobernador y Kláiner encuentra a aliados, que se unen a él. Pero esa es la sensación que tengo al terminar el libro, que es gente andando de un sitio para otro.

De este libro me han gustado las partes que no tenían que ver con los personajes principales, en Irembe, cuando nos habla de Barú o de Ombi, y sobre todo lo que cuenta de Yajim, toda la parte de la molécula de la vida me ha parecido fascinante, estoy deseando que me siga contando todo acerca de los amanuenses de Dios. Y en Elantegnek toda la parte de Cegé, como ha ido avanzando con los conocimientos que ha adquirido.

Sé que este es el segundo libro de cuatro, así que tiene que ser un libro de transición, lo sé y lo acepto, pero eso no quiere decir que no me queje. Sobre todo, porque las partes que me han gustado me han gustado mucho, y creo que podía haber sido un poco más largo.

Otra cosa que me ha gustado es el final, que no voy a contar aquí, pero dejo dicho que me ha gustado mucho, y Almáburaq, también me ha encantado, la ciudad de metal que crece sola, me ha encantado.

En fin, el libro no me ha gustado tanto como el primero, pero está bien, eso sí, esperando con ansias el siguiente a ver si me sigue contando sobre las partes que me han gustado mucho de éste.

04/03/2021