Una muchacha sube una montaña la noche del solsticio de verano y no es vista nunca más. Un joven espera el regreso de su madre, perdida en el bosque. Un complejo vacacional de cabañas es visitado cada verano por una extraña familia. En el reino de las hadas el tiempo no pasa, ¿o sí lo hace? En la Alemania del siglo XIX, un hombre se enamora de una máquina voladora llamada Beatrice. En un futuro cercano, los seres humanos sobreviven en las entrañas de inmensas naves-insecto compuestas de material orgánico. El pyret es un extraño ser mitológico, con la capacidad de convertirse en cualquier animal, e incluso persona...
El universo literario de Karin Tidbeck revela una de las voces más originales surgidas de las letras suecas en los últimos años. Posee el sabor de los cuentos de hadas oscuros, es heredero de la mitología nórdica, y explora las posibilidades de la fantasía para describir inquietudes muy reales, tales como las complejas relaciones familiares, la soledad, y la alienación del ser humano en el mundo en el que vivimos.
Antología
Ficción Científica
Tengo que reconocer que tenía mucha curiosidad por este libro, también tengo que reconocer que no conocía nada de la autora, para mí era una completa desconocida.
Karin Tidbeck es una escritora sueca, con tres libros publicados de los cuales ésta de la que hablamos hoy es la última, y si todas son como esta se está tardando en traducir.
Jaggernath es una antología de 13 relatos de fantasía weird, bastante weird la verdad, pero magníficos. Demuestra la capacidad de imaginación de esta mujer, capaz de crear una mitología en 10 páginas. Muchos de los relatos son caramelos envenenados, donde conforme te vas adentrando en la historia vas descubriendo el horror que plantean. Pero a la vez vas queriendo saber más.
El primer detalle que me ha llamado la atención, aunque sea muy frívolo, es la portada. Había visto la portada de la edición original, me parecía un poco fría, la edición española tiene una de las portadas más bonitas que he visto, además de encajar perfectamente con el contenido.
Los relatos que componen la antología son:
Beatrice
Dos historias de amor paralelas, una entre un hombre y un dirigible, Beatrice, y una mujer y un horno portátil. Es un relato donde trata una situación un poco absurda con mucha ternura. Me ha encantado.
Cartas a Ove Lindström
Las cartas de un hijo a su padre muerto, donde vamos descubriendo su historia.
La señorita Nyberg y yo
Un escritor que le cuenta a su compañera de piso un relato que no ha conseguido acabar sobre ella y un homúnculo nacido en una maceta.
Rebeka
En un mundo donde Dios ha vuelto entre nosotros suicidarse se ha vuelto muy difícil para la protagonista.
Herr Cederberg
Un hombre acomplejado que decide cumplir su sueño de volar.
¿Quién es Arvin Pekon?
Un telefonista que atiende llamadas para organismos públicos empieza a recibir llamadas extrañas.
El complejo de vacaciones de Brita
Una joven escritora va al complejo de vacaciones de su tía abuela, no puede imaginarse lo que va a descubrir allí.
La montaña de los renos
Un relato que empieza con la frase “Cilla tenía doce años el verano en el que Sara se puso el vestido de novia de la bisabuela y desapareció montaña arriba”. Es obligatorio leerlo y disfrutarlo.
Mermelada de mora ártica
Un relato difícil de clasificar. Hay que leerlo.
Pyret
Un estudio sobre el pyret. Una criatura mítica.
Augusta Prima
Un relato que nos cuenta lo peligroso que puede ser el conocimiento.
Tías
Un relato relacionado con el anterior. Donde se presentan nuevos seres fantásticos, es este caso las tías.
Jagannath
Algo ha sucedido en La Tierra y los humanos sobreviven dentro de insectos gigantescos ayudándoles como si fueran bacterias.
La pequeña sinopsis de cada relato no hace justicia de lo que vamos a encontrar en él, efectivamente cuenta lo que dice la sinopsis, pero el relato en si nos va a dejar con los ojos como platos.
No quiero imaginar lo que ha tenido que ser para las traductoras traducir esta obra, me quito el sombrero ante ellas.
Creo que tenemos nueva reina de la fantasía weird y se llama Karin Tidbeck, si alguien lo duda solo tiene que leer el relato Tías.
07/03/2014
