Las trémulas nubes que cubren el planeta Venus ocultan un asombroso secreto: el maravilloso aunque letal mundo de Amtor. Allí las ciudades de los inmortales se alzan sobre las copas de los árboles gigantes que se elevan miles de metros en el cielo mientras feroces bestias acechan a sus pies; extraños fogonazos de luz dan paso a devastadoras tormentas y sus habitantes creen que su mundo es un cuenco con un centro ardiente y un borde helado.