En un mundo decadente e infecto, Paul Clement, un cobrador de deudas de la empresa Barrard Company, productora de inmunidad, llega hasta el Fractal Sanatorium, el hospicio adonde cree que se aloja un moribundo deudor infectado de fractal.
Clement se aloja en el hospicio con la finalidad de recaudar la deuda. Mientras permanece allí, testigo de las miserias de los gestores del sanatorio y del resto de los enfermos de fractal (la enfermedad que consume su cuerpo en llagas), el emisario recibe la notificación de su nuevo destino, saldar la deuda de un enfermo alojado al parecer en uno de los lugares más contaminados e impenetrables, el Hospicio Reiner de Villa Posdana. Una zona altamente influida por el gas vírico que emerge del interior de la tierra y que altera el espacio y su relación con los cuerpos.
Para alcanzar su destino, previamente, Clement analiza el audio del informe de Richard Roland, el último recaudador, empleado de Barrard Company, que trató de llegar hasta allí. Primero a través de la remota y fragmentaria voz de Roland y después impulsado por la necesidad y su propia curiosidad, el cobrador acabará precipitándose en el horror de un abismo irreversible.
Esta distopia de Damián Cordones ha estado en venta como autopublicación un par de años, yo la conocí el otro día, en la presentación de el número 3 de Soyuz, “Pedro y la pulsera mágica” de Juan Antonio Fernández Madrigal que anunciaron que para el 2017 iban a publicar los tres que estaban en autoedición y el cuarto que es nuevo. Después le pregunté al autor por este libro y me dijo que me lo regalaba, así que me fui para casa mas contento que unas castañuelas.
El libro me llegó el otro día, lo leí en un rato, son 85 páginas. En papel, me sorprendió en su momento ese detalle, muy cuidado, eso me gustó mucho, ya lo dijo Pilar Márquez Flores en la presentación, y es cierto.
Es un novela corta que narra como un recaudador de una empresa va a un hospicio a cobrar una deuda, está infectado de Fractal, una enfermedad que provoca llagas en todo su cuerpo hasta que muere. Cuando está en el hospicio recibe su nuevo destino, tiene que recaudar una deuda en el hospicio Posdana en una zona altamente influida por el gas vírico que emerge del interior de la tierra y que altera el espacio y su relación con los cuerpos.
La atmósfera es asfixiante, el recaudador conoce a la gente del primer hospicio que son deprimentes, por su actitud como por su estado.
Damián Cordones inventa un universo completo, la Tierra está echada a perder, no sabemos por qué, para eso tendremos que esperar al libro completo, pero el hecho de inventar todo ese escenario demuestra una gran imaginación.
El año que viene será un año interesante para la editorial El transbordador, este ha sido un gran fichaje.
09/12/2016