Quizás fuese el deseo que formuló en medio de una misteriosa alameda, tal vez la vivencia de una traumática experiencia o que todo lo que amaba acabase extinguiéndose ante sus ojos de la manera más horrible que se pueda imaginar. Lo cierto es que acabó convirtiéndose en una persona obsesionada, irreconocible incluso para él mismo.
Miguel es un joven escritor que abandona su pequeño pueblo natal con la esperanza de ver publicados sus cuentos. Las cosas no salen como esperaba y tiene que volver junto a sus tíos adoptivos, quienes esperan que por fin se haga cargo de los negocios familiares y olvide esa manía suya de escribir. Su regreso coincide con los encarnizados ataques de una jauría de lobos a los rebaños del pueblo. Mientras se organiza una batida, Miguel intenta volver a integrarse en una vida que aborrecía, luchando por no sucumbir ante un sentimiento de fracaso que lo reconcomía por dentro. En Carmen, una vieja amiga de la infancia, encuentra un inesperado apoyo moral que le dará fuerzas para creer que el destino le brindaba una segunda oportunidad, aunque jamás imaginó el precio que tendría que pagar por ella. ¿Hasta dónde es capaz de llegar un hombre por ver hecho realidad el mayor de sus anhelos?