Una historia de aventura y misterio, donde la lucha entre el Bien y el Mal determinará el destino de la humanidad
Si es usted inglés o, debido a cualquier circunstancia, se encuentra en la ciudad de Londres y, atraído por los sucesos aquí descritos, siente la necesidad de visitar el distrito Este a fin de alojarse en el hotel Ferguson, le ruego que atienda mi advertencia y lo considere detenidamente antes de cometer tal imprudencia. Ha de saber que, bajo sus muros, el hotel Ferguson alberga un secreto difícil de ignorar; un secreto que los atrapará a usted y a su familia.
Considere que, una vez cruzado el vestíbulo, nada podrá salvaguardar su bienestar; pues a todos los que hemos osado adentrarnos en las entrañas del Ferguson nos ha resultado difícil preservar la cordura. Y, como habría dicho su antiguo dueño, mi buen amigo Edward L. Ferguson: «Éste es su tiempo para ser felices».