La selva es un dios hambriento. Uno que permite vivir a salvo en sus dominios pero exige el más alto de los precios a cambio. Su voracidad no termina nunca y aquellos que viven bajo su control deben entregarle a sus hijos como parte de un cíclico tributo caníbal.
La nueva novela de Elaine Vilar Madruga (tras su aclamada ‘La tiranía de la moscas’, publicada por Barrett, premio Cálamo 2021, y actualmente en su sexta edición) es un cuento de terror caribeño en el que las madres son obligadas a criar a sus propios hijos como futuro alimento, en un sacrificio hecho de sangre y locura. En esta distopía de la atrocidad, si se desea sobrevivir, ninguna mujer puede decidir no ser madre. Y ninguna madre puede no convertirse en una mera productora de carne humana para que el sistema de ofrendas y retribuciones siga funcionando. En el exterior, más allá de los límites de la selva, un mundo despiadado de guerrilleros y narcos hace imposible la vida. Una vida y una seguridad que la selva garantiza a sus habitantes, quienes renuncian a cualquier tipo de derecho y esperanza en esta fábula terrible sobre la maternidad y el cuerpo de la mujer.