Suda Chikao es un ciudadano nipón de ciento veinte años en el 3328. Como tantos otros está en la denominada cuarta edad y malvive con múltiples trabajos temporales de baja estofa.
Pero el señor Chikao tiene una afición en su escaso tiempo libre: escribir novelas pulp entre la inmundicia del hotel cápsula en el que pernocta.
En un Japón donde la falta de natalidad ha forzado la extensión de la vida de la población sin importar el coste, nuestro protagonista conocerá a una misteriosa dama.
Una aventura al borde la cordura donde el peligro se cierne en una distopía en la que el gobierno y la Yakuza van directamente de la mano, y la realidad y la ficción pueden no estar del todo definidas…
Pulp
Ficción Científica
Estamos ante una novela que nos quiere recordar a los pulp españoles, los bolsilibros que había en los 80, yo compré algunos de esos.
El libro empieza presentándonos a Suda Chikao, un hombre de ciento veinte años que malvive haciendo trabajos temporales, vive en un hotel de capsulas, pero él tiene una pasión por escribir novelas pulp.
Una noche andando por el barrio encuentra a una dama en una silla de ruedas, que no tendría nada de especial si no fuera porque es la protagonista de su última novela, la que está escribiendo.
Los personajes no están muy bien definidos, pero eso es algo que los bolsilibros hacían. Tampoco tiene grandes giros ni nada por el estilo, es una novela de a duro.
Los personajes que salen solo son Chikao, el protagonista y la dama en la silla de ruedas, que no tiene nombre, porque Chikao quería hacerla muy misteriosa. Los demás solo están para acompañar a estos dos y morir si es necesario.
Me ha gustado que durante todo el libro analiza la forma de escribir de esos bolsilibros, con la excusa de que hay un misterio, el autor valora todos los clichés.
El libro está bien escrito, se lee rápido, yo lo leí de una sentada, es agradable de leer. Me ha gustado.
17/03/2023
