No nos engañemos. El mundo es una gran fábrica. Una inmensa industria en la que todos tenemos una labor, pero absolutamente nadie sabe a ciencia cierta cuál es el producto final. A nadie le importa. Os presentamos un cuento negro con moraleja. Un cuento sobre una colosal fábrica. Debe tomarse como una metáfora, no como un cuento fantástico. Debe tomarse como una fábula, pues los protagonistas de esta historia, los operarios, a pesar de su animalidad, están gobernados por pasiones humanas.
Bienvenidos a Mundofábrica.