Robby y sus amigos solo quieren descargarse algo de porno un viernes por la noche. Pero a principios de los 90 las descargas no son del todo fiables, y terminan viendo el suicidio televisado de un político. A partir de este momento, el hombre muerto de la cinta los acosa sin descanso, se les aparece en sueños y les tienta con la idea de morir. Solo buscan librarse de él, pero se darán cuenta de que han emprendido un camino del que no hay retorno. ¿Qué pueden hacer para detenerlo? Cualquier cosa que intenten, solo conseguirá enredarlos aún más en las fauces sanguinolientas del hombre muerto.
He leído este libro y no me ha gustado nada L. Me vais a perdonar porque pienso contar todo lo que he odiado de este libro.
La trama me parecía interesante. Un grupo de chicos quieren ver algo de porno un viernes por la noche, así que se descargan un video de internet, pero lo que ellos creían que era un video porno resultó ser una grabación de un suicidio televisado. Aquí empiezan los problemas, después de verlo, no pueden dejar de pensar en ello. Tienen visiones del hombre muerto, aunque yo no podía quitarme de la cabeza que era porque estaban traumatizados. No creo que haya nada sobrenatural.
Ellos intentan encontrar solución a lo que les está pasando, empiezan intentando averiguar quién es el muerto, para ello, uno de los chicos se lo dice a una amiga suya, de la que está enamorado en secreto, después la chica se lo dice a un primo, que es dueño de un videoclub, poco a poco van muriendo todos. Lo que me ha molestado del libro es que si muriesen por algo sobrenatural lo entendería, que es lo que he comentado antes, los chicos están traumatizados.
Y este es el libro, siento mucho no haber descrito lo que pasa con más claridad. Pero yo me esperaba un libro de un estilo y me he encontrado otro distinto.
24/01/2025