Un cargamento humano camino de la servidumbre en el exilio... Una ciudad pirata que surca los océanos... Un milagro oculto a punto de ser revelado... Ésta es la historia del viaje de un prisionero. La búsqueda de la isla de un pueblo olvidado, de la más asombrosa bestia de los mares, e incluso de un lugar fabuloso, una inmensa herida en la realidad, una fuente de inimaginable poder y peligro...
En el nuevo libro de una carrera asombrosa, el autor del aclamado y premiado La estación de la Calle Perdido amplia el horizonte más allá de las fronteras de Nueva Crobuzon y nos trae otro colosal relato de increíble diversidad e imaginación desbocada. Una novela impresionante, que se puede leer de manera independiente, y que con toda seguridad sorprenderá y atrapará hasta al paladar más exigente. Es emocionante, inquietante, siempre humana y provocadora. Su exuberante e inagotable inventiva, así como la calidad narrativa, mantienen el interés del lector hasta el final.
La cicatriz es una novela más oscura, más ambigua que su precursora, aunque mantiene las pautas que han hecho de Miéville uno de los mejores escritores del momento.