Ha pasado tiempo desde que desaparecieron bajo tierra, huyendo de una corporación de dudosas intenciones. La situación se ha calmado, y el regreso a la superficie parece estar yendo bien. Al menos para Ryf, que ha podido cambiarse la prótesis y volver a ver a su familia y amistades. Isla, mientras tanto, se adapta como puede a la vida en los túneles, demasiado frágil ahora que no puede andar como para aventurarse a salir. Hasta que aparece una gente fantástica que ha montado una startup que va a cambiar el mundo.