Halley tiene nueve años y es el capitán de la Hale-Bopp, la mejor nave del espacio exterior, con la que se dedica a explorar el universo en compañía de su robot Bip. Un día, se queda sin combustible y debe realizar un aterrizaje forzoso en Naak, donde hay una base humana de investigación... justo al otro lado del planeta. Desde allí, recibirá la ayuda de Biela, la investigadora más joven del equipo de científicos.
Monstruos que parecen hechos de espaguetis, una gata cyborg y padres que no escuchan serán los compañeros de Biela, Halley y Bip en esta carrera contrarreloj.