Ficción Científica

La máquina Pymblikot

He leído algo de Daniel Mares, reconozco que muy poco, Madriz y 6, y pare usted de contar, pero lo que he leído me ha gustado mucho. No me he atrevido con Los horrores del escalpelo pero es que sus 800 páginas me dan mucha pereza. Pero cuando vi esta novela de oferta no me pude resistir, además toda una ganadora del premio Ignotus a la mejor novela corta 1999, así que la compré sin pensarlo demasiado. Y no me arrepiento nada.

La novela me ha gustado mucho, me ha gustado sobre todo el universo en el que se desarrolla, es una cascada constante de ideas, me ha encantado.

La trama es sencilla, un regimiento, aparentemente decimonónico, que avanza con una misión desconocida por un páramo, cuando, en medio de la nieve, encuentran una casa, y se dirigen a ella para buscar refugio.

Sencillo, pero conforme avanza la narración te das cuenta de que los soldados han venido con la misión de matar al Duque de la Tierra, que vienen de Tau Ceti, son tropas enviadas por el rey para acabar con la rebelión. Descubrimos que viajan de un planeta a otro en balas especiales disparadas por cañones gigantescos, como en la novela De la Tierra a la Luna, de Julio Verne, que los soldados no son como nosotros, los miembros amputados vuelven a crecerles, y poco a poco descubrimos que el dueño de la casa, Pymblikot, tiene sus propios secretos.

Aparte tenemos a la hija de Pymblikot, Clementine, que hará que el protagonista y algunos de sus compañeros se enamoren perdidamente de ella.

La novela es genial, me habría gustado que explicase un poco mejor la tecnología de transportes, los sistemas planetarios están más cerca que en nuestra realidad, eso es un fallo no poder explicarlo mejor, eso puede dar mucho juego.

No sé si podría clasificarse la novela como steampunk, pero hay que reconocer que tiene muchos aspectos que le darían esa clasificación.

En general me ha parecido una novela fuera de serie, llena de imaginación y buen hacer.

30/10/2015