El emperador Taizu de la Novena Dinastía gobierna sobre Kitai, el reino más rico y poderoso del mundo. Su poder se extiende gracias al empuje de sus ejércitos y a la burocracia de los mandarines, que han traído décadas de paz. En Kuala Nor, un campo de batalla en medio de las montañas, Shen Tai, hijo del difunto general Shen Gao, honra la memoria de su padre enterrando a los muertos, amigos y enemigos, de incontables batallas libradas en esa llanura. Los fantasmas le hablan por las noches, apenados o furiosos, hasta que entierra sus huesos y acalla sus voces. Por su labor recibe el fabuloso regalo de 250 Caballos Celestiales. Este regalo cambiará su vida y le lanzará al torbellino de las intrigas políticas y militares de finales del reinado del anciano emperador.