El rey Kuśtī Rājā se siente traicionado por su más querido y cercano consejero, Bud’dhimāna Śirasēsara. El monarca pide a gritos la cabeza del que consideraba su mejor amigo. A la muerte de Bud’dhimāna Śirasēsara la sangre del rey Kuśtī Rājā quedará maldita por siglos, y todos sus descendientes correrán terrible suerte.
Nadie sabe con exactitud cómo funciona la maldición de Bud’dhimāna Śirasēsara hasta que, en los confines del reino, una extraña torre comienza a levantarse de forma misteriosa rodeada por un profundo bosque negro repleto de sanguinarias criaturas.
Los rumores recorren el reino. Todo el que se acerca a la torre muere de forma horrible. Ante esta situación, el rey envía a investigar a su mejor hombre, su propio hijo, Śaktiśālī Hāta, el que será el primero en perecer de los nueve primogénitos nacidos de la sangre de monarcas, cada vez más incapaces, destinados a un fin incierto.
Todos los primogénitos nacidos de las relaciones conyugales o extramatrimoniales de los monarcas de un reino en franca decadencia caerán en la maldición de la torre. Si eres el primer hijo de un rey, solo existe un destino: morir en la torre presa de la maldición. ¿El motivo? Nadie lo sabe ni lo sabrá durante siglos hasta que el noveno primogénito no llegue al edificio y alcance su estancia más elevada.