Primero, luneció
y Ekachi partió a Xanadú.
Luego, soleció
y K-4mi partió a Xanadú.
Después, niebleó
y Yoru partió a Xanadú.
Al final, tormentó
y Y-0ka partió a Xanadú.
Xanadú es una nostalgia controlable: el mismo viaje, el mismo tren, el mismo desierto tan áspero y tan gris. A veces los detalles se confunden: hay un convoy en vez de un tren, un pantano en lugar de un desierto. Pero el camino nunca llega a cambiar de verdad.
No realmente.