Habita, en el fondo de cada hombre, un monstruo primigenio vinculado a nuestra naturaleza ancestral. A veces lo olvidamos, o intentamos distraer nuestra atención, mirar hacia otro lado, pero él permanece alerta, agazapado. La evolución y el progreso no lo han destruido. Ni siquiera lo han adormecido o silenciado, sino que, más bien al contrario, lo han puesto en evidencia: a través de la genética, del estudio anatómico, de la filosofía... o de nuestro propio comportamiento. En ocasiones, basta una chispa para despertarlo, para que debamos confrontarnos a él como sociedad. O en solitario.
Francisco José Segovia Ramos nos invita a un trepidante viaje que combina con acierto la profundidad de precursores de la ciencia ficción oscura, como el Frankenstein de Mary Shelley, con la palpitante fantasía desatada del subgénero kaijū, que dio a luz a iconos como Godzilla, Mothra o Gamera.
En sus páginas nos presenta el Japón del futuro próximo, donde los avances tecnológicos y los avatares de la Historia no han vacunado a la humanidad contra su propia ambición, lo que la llevará irremediablemente a cometer los más grandes errores del pasado. Pero, más aún, nos presenta a El hombre tras el monstruo, pues esta no es una historia anónima, sino una que podrías haber protagonizado tú. Porque los monstruos, las aterradoras bestias de nuestro imaginario colectivo, no son ajenas a nuestra naturaleza, sino que, al final, anidan en nosotros mismos. Es ahí, en nuestro interior, donde acechan los auténticos monstruos a la espera de la decisión o el error que les permitirá ver la luz y desatar la destrucción.