Twitter Facebook
Entrar o Registrarse
desc

Si no tienes cuenta Regístrate.

Bill en el planeta de los Esclavos Robots

Bill en el planeta de los Esclavos Robots
Harrison, Harry 1989
779 visitas

Grandote, fortachón, encefalograma plano: el ejército hizo de Bill el perfecto soldado de las galaxias, el perfecto peón de la épica lucha entre la cultura y la civilización terráqueas y todos los imperios del mal (son muchos) del universo, el perfecto fantaseador sexual y el perfecto aspirante a la muerte por cirrosis alcohólica. Pertrechado con dos brazos derechos -el que cuelga de su hombro izquierdo es negro, rescatado, tras la muerte de un camarada, por un cirujano militar poco escrupuloso-; un glorioso colmillo procedente del más sanguinario de los muy sanguinarios instructores de reclutas, y de un pie (o una sucesión de pies, todos insatisfactorios: ¿quién va a molestarse en buscr buenos pies a los soldados rasos?) en sustitución del que se había volado; no puede decirse que Bill hubiera triunfado en la vida, incluso procediendo de una granja. Pero el destino, siempre misericordioso con los más brutos, le iba a deparar las más estupendas, indeseables y emocionantes pruebas... EN EL PLANETA DE LOS ESCLAVOS ROBOT En la primera de sus épicas aventuras, Bill pasará, desde la tripulación de la nave-basurero Imelda Marcos a un planeta cuya vida está basada en el metal; también aparecerá Bgrr el chinger, miembro de una raza que es algo así como el Saddam Husein del espacio: bastante inofensiva (para el Imperio), pero convertida por los terráqueos en paradigma del enemigo que hay que destruir.






Compartir en facebook Bill en el planeta de los Esclavos Robots
Compartir en Google+

-

Votos: 0