Will y Nikki reciben la mejor noticia que puede esperar cualquier matrimonio en el ala de oncología de un hospital. La enfermedad ha remitido. Las metástasis han desaparecido. Todo apunta a que saldrá de allí completamente recuperada, contra todo pronóstico. Los médicos no pueden creerlo. ¿Qué probabilidades había? La palabra «milagro» flota en el ambiente.
Una vez en casa, la felicidad se vuelve extraña. Nikki está bien, sí, pero… existen un montón de pequeñas cosas, detalles sin importancia, nimiedades, que hacen que Will comience a preocuparse. ¿Qué está sucediendo? ¿Qué precio ha pagado su esposa por su recuperación?