El Horizonte de sucesos es un bar perfectamente normal en una ciudad de provincias que no podría ser más anodina. Sin embargo, todas las semanas se abre una puerta a lo desconocido cuando un individuo anónimo de aspecto y ademanes decimonónicos narra una historia (que él asegura verdadera) que trasciende los límites de la ciencia y al mismo tiempo resulta del todo plausible.
Científicos que decodifican radiación anterior al Big Bang, personas capaces de recordar el futuro, inventores víctimas de su propia creación... todo eso y más desfila por las historias que el Narrador Inverosímil cuenta a su cautiva audencia. Incluida la última, en la que deja de ser el narrador y se convierte en un personaje más.
Horizonte de sucesos es el ciclo de relatos de Rodolfo Martínez donde este más se acercó a la ciencia ficción dura (en la que las especulaciones técnico-científicas deben estar basadas en ciencia real) y al mismo tiempo es un homenaje a la literatura oral a la manera de la Taberna del Ciervo Blanco de Clarke o Trafalgar de Angélica Gorodischer.
«Castillos en el aire», uno de los relatos que lo forman, ganó el Premio Ignotus 1995 al Mejor Relato.