A su llegada al circumplaneta Valera no se encuentra con el autoplaneta thorbod, ya que hace mucho que éste ha partido en dirección a la Tierra. De este modo Valera no encuentra enemigo en la flota thorbod destacada en Atolón, a la que arrasa con toda facilidad en apenas dos meses de campaña tal como nos describe el autor al inicio de la novela sin pararse en describir menores detalles.