En plena era inalámbrica donde los datos personales, la información y los virus comparten escenario, Antwone López, narra en lenguaje de ficción, un tema de rabiosa actualidad como son los ataques de virus, la realidad de nuestra vida social en red y como ha modificado la conducta del ser humano. El lector, como si de un videojuego mental se tratase, se sumerge en un viaje al centro de Internet, para ir descubriendo que ocurrió en Silicon Valley para que se haya convertido en la cuna de la innovación y la tecnología.
El Rey de Internet cuenta la historia de Manuel, un adolescente del futuro, que descubre el secreto de Internet a través de una antigua tablet encontrada en el viejo desván del pueblo de su abuela. Junto a su tutor, ENE, un humanoide muy avanzado consigue traspasar la pantalla y vivir el mayor videojuego que jamas podía imaginar, descubriendo un apasionante reino virtual. Para él solo es un juego, pero no para el resto de la humanidad. Paralelamente en el tiempo presente, Tomás, un rock star gay muy influyente, pero con conflictos sexuales, recibe unas cartas con la historia de la familia Netinger en las cuales conoce el pasado de Clara y Zoe, quienes junto con su padre Joseph conviven con el nacimiento de las primeras revoluciones tecnológicas. Todas estas informaciones y su deseo de conocer qué esconde internet llevarán a Tomás a emprender un viaje a San Francisco y Silicon Valley donde explosiones, persecuciones, alucinaciones y conexiones con vidas pasadas se mezclan con el fin de sanar el karma de Jesucristo. Pasado, presente, futuro y un tiempo desconocido son los escenarios por los que El Rey de Internet va dejando su huella en el "no tiempo", sin más arma que la palabra y el amor, para conseguir transmitir que dichos valores son la base de cualquier sociedad, sin importar espacios ni tiempos.