A la Enterprise se le ha encomendado la misión de mediar entre Chyrellka y su colonia Vancania, que ha iniciado una lucha de liberación justo antes de que le fuera concedida la independencia. Y si extraño le parece a Kirk el comportamiento del primer ministro de Chyrellka cuando éste sube a bordo de la nave de la Federación, más extraño les parece a Spock y McCoy, enviados al planeta rebelde, el comportamiento de Delkondros, el dirigente independentista. Porque en realidad, los problemas son más amenazadores, y en ellos tienen mucho que ver los klingon... y un fantasma del pasado, un renegado terrestre.