Marcos Solarza es, quizá, el mejor vendedor de paquetes de realidad aumentada de Sensolux. Ambicioso, carente de escrúpulos y de métodos expeditivos, sería capaz de venderles hielo a los esquimales. Privilegiado, casi en la cima de su mundo y su profesión, su futuro no puede ser más prometedor. Como todos los que le rodean, Marcos accede al mundo a través de múltiples filtros que realzan y amplifican sus percepciones sensoriales.
Pero un día los filtros se apagan y Marcos empieza a ver el mundo tal como es: gris, sucio y decrépito, a punto de desmoronarse. Luchará con garras y dientes por volver al paraíso del que ha sido expulsado, tratando de huir de una realidad en la que nadie en su sano juicio querría permanecer ni un minuto y encontrando por el camino varias respuestas a preguntas que habría preferido no hacerse.