En las humeantes ruinas de un laboratorio de investigación genética se encuentra el cadáver de un hombre que ha padecido una espantosa y desconocida enfermedad. Los agentes Mulder y Scully sospechan que anda suelto un portador de ese virus mortal. Y, en su carrera por tratar de evitar una epidemia de consecuencias devastadoras, tendrán que enfrentarse a un hombre desesperado y enloquecido, un hombre cuyo mero contacto causa una muerte horripilante y tal vez una resurección aún más horripilante...¿ES POSIBLE QUE UNAS MÁQUINAS CREADAS PARA CURAR APRENDAN A MATAR?